miércoles, 19 de agosto de 2009
Momentos de la Observación
Al observar se obtiene información de lo observado, ésta se almacena en la memoria como imágenes o visualizaciones que permiten ser recordadas, de tal manera que con sólo hacer referencia al concepto se puede uno imaginar de qué se habla. Un ejemplo muy común es el sabor de un limón, al recordarlo salivamos sin necesidad de probarlo. Con sólo verlo igualmente salivamos recordando su sabor ácido.
Para analizar situaciones, debemos primero observar de manera concreta o abstracta. Aquí aprenderás a diferenciar una de la otra.
La observación tiene dos momentos:
a) Un momento concreto.
b) Un momento abstracto.
El momento concreto tiene que ver con el uso de tus sentidos para captar las características del objeto, y el momento abstracto tiene que ver con la representación de los datos en tu mente.
Algunas veces se requiere de varios sentidos para observar objetos y/o situaciones. Asegúrate de usar todos tus sentidos para desarrollar las habilidades básicas.
Es importante que tomes conciencia de estos dos momentos (abstracto y concreto) para que logres una mejor observación, pues el primer momento te permite, si usas todos tus sentidos, una perspectiva más amplia y completa de la observación, y el segundo momento se relaciona con la representación mental que haces del objeto de observación.
En síntesis, la observación es el medio por el cual puedes entrar en contacto con el medio que te rodea, en donde los sentidos tienen un papel esencial.
Instrucciones para la realización del Ejercicio:
1. Imagina que vas al mercado, a la sección de frutas y verduras.
2. Imagínate observando detenidamente al menos tres frutas y tres verduras.
3. Contesta las siguientes preguntas:
¿Qué forma tienen?
¿De qué color son?
¿Cuál es su textura, suave, áspera?
¿A qué huelen?
¿Son duras, blandas?
4. Elabora al menos tres preguntas más que definan características de lo observado.
5. ¿Serían diferentes tus observaciones si vas al mercado en vez de imaginarte que estás en él?
¿Por qué?
6. Pruébalo, ve al mercado (o al refrigerador de tu casa) y repite el ejercicio del punto 2 al 4
7. ¿Qué sentiste?
8. ¿Qué aprendiste?
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